I Pedro 1:3-12 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, 4 para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, 5 que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero. 6 En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas, 7 para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo, 8 a quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorioso; 9 obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas. 10 Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, 11 escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos. 12 A éstos se les reveló que no para sí mismos, sino para nosotros, administraban las cosas que ahora os son anunciadas por los que os han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo; cosas en las cuales anhelan mirar los ángeles.
1:6-9. LA PERSECUCIÓN PREPARA AL ESCOGIDO PARA RECIBIR LA HERENCIA
Persecución. El apóstol Pedro está respondiendo probablemente a lo que se conoce como el primero de diez periodos de persecución de los cristianos. La primera persecución de los cristianos comenzó en el año 33 D.C., pero las persecuciones sistemáticas por los romanos se reporta que fueron conducidas por Nerón. Esto es más probable que haya sucedido a principios de los 60’s. Pedro fue martirizado alrededor de los años 67-68 D.C. Pedro sus enseñanzas acerca de la persecución han sido importantes para los cristianos del primer siglo pero también para muchos que fueron luego perseguidos.
Los judíos cristianos estuvieron conscientes de los tiempos de persecución del Antiguo Testamento. Dios usó a los paganos para castigar al apostado de Israel. ¿Estaba pasando esto de nuevo? Efectivamente, para el año 70 D.C. el templo fue destruido por última vez y luego Jerusalén fue destruida. Los padres de la iglesia joven no dudaron en atribuir la destrucción del templo y Jerusalén a la rebelión de los judíos en contra del Mesías y en contra de los primeros cristianos. ¿Pero qué de los cristianos que estaban sufriendo persecución? Pedro les enseña que sus tribulaciones tenían el propósito de purificar su fe. La fe verdadera no puede ser destruida.
La persecución es prometida. La persecución no debe de caer como sorpresa. ¡Los enemigos de Dios utilizarán todos los medios a su disposición para detener el evangelio! Poco saben los perseguidores de que son instrumentos de Dios para probar y purificar la fe del cristiano y que eventualmente la cristiandad duraría más que el Imperio Romano.
La persecución no se debe necesariamente a los pecados del cristiano, sino que manifiesta el pecado del mundo. Muestra el problema del pecado que solo los cristianos pueden resolver. Los primeros cristianos pudieron haberse preguntado que si el Señor se llevo a los profetas, sacerdotes, reyes, al templo, y a Jerusalén entonces ¡ellos eran los siguientes! No es así, dice Pedro, Dios está usando la persecución, para purificarle.
Pero ellos fracasarán, Mire a la cruz y a la resurrección. ¡Dios usó la cruz para vencer a Satanás, al pecado y al mundo! Jesús fue asesinado como sustituto para su pueblo; Él pago la deuda al Padre y en la resurrección Él venció al mundo.
Los cristianos nos se regocijan por la persecución sino que se regocijan durante el periodo de persecución. Los cristianos saben a dónde van, ellos saben que están siendo preparados para ir al cielo, y oran por sus perseguidores. El cristiano perseguido se regocija porque lo peor que puede hacer el enemigo de los cristianos es mandar al creyente al cielo.
Por medio de la persecución el cristiano es preparado. La persecución tiene un efecto purificador. La genuinidad de la fe, lo preciado de la fe y el propósito de la fe son presentados en primer plano. Las tribulaciones traen alabanza, honor y gloria a Jesús y amor, fe, gozo y gloria inexpresables para el creyente.
¿Qué tal en Europa? ¿Deben “regocijarse grandemente” los cristianos de que la cristiandad bíblica se sostiene como una opción ridícula para valores sociales y morales?
¿Debemos de volvernos resentidos cuando el creacionismo está prohibido como una opción académica en nuestras escuelas públicas? O ¿debemos enseñar a los miles de estudiantes en la escuela dominical la verdad acerca de nuestros orígenes y luego enviarlos al mundo como jóvenes apologistas de la verdad?
La cultura y política de la muerte se encuentra con vida y bienestar en el “mundo libre.” Con una sonrisa en sus caras, políticos dicen que le hacen un favor a la madre al permitirle abortar. ¿Debemos de desesperarnos porque la adopción no se presenta como la solución al aborto? O ¿deben los cristianos hacerse amigos, consejeros, acogiendo y adoptando a niños? ¡Millones de niños no deseados están recibiendo amor de cristianos!
El rechazo del pueblo de Dios y la iglesia siempre se revertirá en los sistemas del mundo, ya sea el comunismo, socialismo o la democracia. Esta es la naturaleza del reino soberano de Dios en medio de los reinos rebeldes del hombre. Sin embargo, la cristiandad verdadera siempre vencerá a los enemigos de Dios.
1:10-12. LA PROFECÍA APUNTA AL SUFRIMIENTO EN EL CAMINO HACIA UNA HERENCIA ETERNA
Lo que se necesita decir acerca de Dios, el hombre, salvación, y eternidad se ha escrito tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Las profecías contenidas en la Escritura apuntan a un difícil y sin embargo glorioso futuro del creyente.
El mensaje central de profecía. “Los profetas inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación.” Nuestro pasaje apunta a un mensaje de salvación por gracia con dos dimensiones: sufrimiento y gloria. El mensaje es que hay salvación eterna y liberación de en medio del sufrimiento para aquellos que tienen fe en Jesucristo.
El mensajero de profecía. Pedro dice, “Para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” (1Pedro 2:9). En Hechos 2: 17 Pedro dice que cuando vendrá el Espíritu Santo “vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán,” cumpliendo con la profecía del Señor quien dijo que “pero el más pequeño en el reino de líelos, mayor es que él (Juan el Bautista)” (Mt. 11:11). Ahora todos los creyentes son profetas que hablan la palabra de Dios para el contexto humano.
El método de profecía. Note que los profetas cuestionados inquirieron cuidadosamente y mantuvieron su enfoque en el Mesías. Los profetas son estudiantes de la Biblia. Ellos prueban su entendimiento de las profecías por medio de la Escritura y otros profetas. Cuando Pat Robertson profetizó que en el año 2007 habría un gran desastre nuclear, y no sucedió, entonces necesita ser declarado un falso profeta. [La cláusula de escape para estos profetas es que el pueblo de Dios oro tanto que Dios tuvo misericordia y no mandó la calamidad.] Cuando estudiamos la Biblia en lo que concierne a la segunda venida tiene que ser sostenido bíblicamente por dos pasajes claros o más. ¡Lo que está claro es la Gran Comisión (predica el evangelio del reino a todos los pueblos), la Segunda Venida y el Juicio Final! ¿Qué más “información interna” necesitamos para ser obediente y servir a Cristo (Hechos 1:6-8 Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra)?
La profecía de la gracia. Los cristianos estaban enfrentando persecución. Los legalistas dirían que los cristianos están sufriendo por falta de fe. Por el contrario, Pedro habla acerca de la gracia de Dios para los cristianos en medio del sufrimiento, pruebas y persecución. Los profetas del Antiguo Testamento sabían que Cristo sufriría (Isaías 53:1-10) y que sería glorificado (Isaías 53:11-12). No debería parecer extraño para los cristianos que también ellos sufrirían por causa de Cristo.
La profecía de ánimo en medio del sufrimiento. El profeta no es aquel que se sienta en las gradas y que apuesta sobre los resultados del juego, sino el entrenador que guía al pueblo de Dios a lo largo del sufrimiento y los lleva a la victoria. Escuche la voz profética y pastoral, “confesemos nuestros pecados, superémonos y sirvamos al Señor!” “No mires al pecado y tentación y sigue mirando hacia Jesús, y así camina hacia adelante.” Los profetas vieron sufrimiento pero también vieron eternidad gloriosa.
La profecía de gloria. ¡Quién mejor que el Espíritu Santo conoce la gloria de Dios! Su Palabra inspirada y testimonio impulsan al lector y al estudiante de la Biblia a ver las glorias de Cristo. Cristo aguantó el sufrimiento en la cruz para poder vivir en la gloria de la resurrección y su reino. ¿Puede ver la gloria de Dios en medio el sufrimiento de los cristianos? Cuando el cristiano sufre, él ve más allá del dolor inmediato y mira hacia la meta a la cual se dirige.
¡La profecía apunta hacia nosotros! Todos los profetas del Antiguo Testamento estaban buscando en las Escrituras diligentemente para responder el quién, qué, cuándo, dónde y cómo de la venida del Mesías. Hay literalmente cientos de profecías en el AT acerca de Jesús. Los ángeles también estaban deseosos de saber acerca de la revelación de la salvación en Cristo.
Hoy en día, ¡un pequeño niño que conoce y ama a Jesús sabe más acerca de Jesús que los profetas del Antiguo Testamento! ¡Los profetas buscaron diligentemente pero el niño creyente ha encontrado el tesoro! ¡Tan increíble es la revelación de Cristo!
Esta profecía continúa hoy en día en la predicación del evangelio. “Que ahora os son anunciadas por los que os han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo”. Note el mensaje de los verdaderos profetas: el evangelio de Jesucristo. Todos los verdaderos profetas deben proclamar en evangelio bíblico de otra manera ellos son falsos profetas y debemos separarnos de ellos. El pueblo de Dios debe congregarse donde los verdaderos profetas predican el evangelio. También note quién envía a verdaderos profetas: Dios, a través del Espíritu Santo que viene del cielo. El profeta debe saber que Dios lo ha enviado para predicar el evangelio.