5 Entonces el ángel que yo había visto de pie
sobre el mar y sobre la tierra, levantó su mano derecha al cielo,
6 y juró
por el que vive por los siglos de los siglos, QUIEN CREO EL CIELO Y LAS COSAS
QUE EN EL hay, Y LA TIERRA Y LAS COSAS QUE EN ELLA hay, Y EL MAR Y LAS COSAS
QUE EN EL hay, que ya no habrá dilación,
7 sino que
en los días de la voz del séptimo ángel, cuando esté para tocar la trompeta,
entonces el misterio de Dios será consumado, como Él lo anunció a sus siervos
los profetas.
El ángel
hace ahora un anuncio, y lo confirma con un juramento. Algunas veces se ha
tomado el anuncio en el sentido de que " el tiempo no sería más.» Es
decir: que el tiempo, tal como lo conocemos ahora, estaba a punto de concluir,
y la eternidad de empezar. Es más probable que lo que quiere decir es que ya no
queda tiempo, que no puede haber más retraso, que el Anticristo está a punto de
irrumpir en la escena con todo su poder destructivo. Como decía el autor de
Hebreos: «Porque aún un poco, y el que ha de venir vendrá, y no se demorará»
(Heb_10:37). Ha sonado la hora cuando el hombre de pecado se manifestará (2Te_2:3).
Cualquiera que sea el significado de la frase, no cabe duda que el mensaje es
que el Anticristo está a punto de invadir la Tierra; el escenario está listo
para la contienda final.
Cuando esto suceda, como dice la versión Reina-Valera, «el
misterio de Dios se consumará.» Esto significa que todo el propósito de Dios en
la Historia humana será revelado. Hay mucho en la vida que es difícil de entender;
la maldad parece triunfar siempre. Pero, según lo vio Juan, va a haber una
manifestación final. Dios y el Anticristo, el bien y el mal, se enfrentarán; se
obtendrá una victoria definitiva, las preguntas recibirán respuesta y los
tuertos se enderezarán.
La verdadera clave de este pasaje del versículo 6 es (Daniel
12: 7 ); donde el hombre vestido de lino jura que para el fin de las maravillas
debería haber un tiempo, tiempos y medio, y aquí el ángel jura que ese tiempo
ya no debería ser; es decir, que este tiempo, y los tiempos, y la mitad del
tiempo, ya no deberían ser; que estas fechas estarían terminadas y que los
eventos fijados en ellos se cumplirían, cuando el séptimo ángel comenzara a
tocar su trompeta: se hacen las mismas divisiones de tiempo en ( Apocalipsis
12:14); y son lo mismo exactamente con los 1260 días, o años, y los cuarenta y
dos meses de años, tan a menudo mencionados en este libro: por un tiempo es un
año profético, es decir, 360 años; y los tiempos son dos años proféticos; y la
mitad del tiempo es la mitad de un año profético, o 180 años, en los 1260 años:
ahora agregue los varios eventos que se llevarán a cabo en este período de
tiempo, y dará el sentido completo de este pasaje; el ángel jura que el reino
del anticristo, su tiranía sobre los santos, su persecución de ellos, que
duraría cuarenta y dos meses ( Apocalipsis 13: 5 ), ya no debería existir; ni
de la ciudad santa pisoteada por los gentiles, los papistas, que lleva la misma
fecha, ( Apocalipsis 11: 2 ), y se llama los tiempos de los gentiles, (Lucas
21:24 ); ni de los testigos que profetizan en cilicio, que tiene la misma medida
de duración ( Apocalipsis 11: 3 ); ni del retiro de la iglesia, y de estar
escondido en el desierto ( Apocalipsis 12:14 ); en resumen, el tiempo de las
cuatro monarquías, y de la última de ellas, la romana, y de la última rama de
esa, la papal, no debería ser más que hasta el sonido de la séptima trompeta,
cuando los reinos de este mundo se convertirán en los reinos de nuestro Señor y
de su Cristo; ( Apocalipsis 11:15); las palabras tendrán que ser expresadas,
como algunos han observado, "que no se demore más"; es decir, de la
venida y el reino de Cristo; aunque el novio se haya demorado, él vendrá y no
se demorará más allá del tiempo que el ángel jura; cada sello del libro sellado
es un retraso y una parada en la aparición abierta del reino de Cristo; y la
apertura de cada sello es un avance para ello; y cuando se abrió el sexto
sello, y se destruyó el paganismo, y el cristianismo se extendió por todo el
imperio, se podría haber esperado que apareciera el reino de Cristo; pero había
que abrir un séptimo sello, que era un obstáculo y que, cuando se abrió, trajo
ruina y destrucción al imperio cristiano, tanto occidental como oriental, bajo
las primeras seis trompetas.
Juro
por Aquel que vive por los siglos de los siglos
Aquí y en Daniel Dan. 12: 1, los ángeles juran subrayar la
naturaleza inmutable del mensaje que dan. En ambos casos, el aspecto del mensaje
que se enfatiza es el momento con el que se llevarán a cabo los eventos
profetizados. Aquí, el ángel le dice a
Juan que la larga historia de demoras donde la gracia de Dios le impidió
moverse en el juicio final ha llegado a su fin. No hay
persona más alta por la cual uno pueda jurar que el Dios eterno (Apocalipsis 1:18
; Apocalipsis 4: 9).
Ya no
debería haber demora
χρόνος οὐκέτι ἔσται [ chronos ouketi estai ], el tiempo ya no será.
Aunque los eventos proféticos como la venida de Cristo para
su iglesia y el día del Señor son inminentes, podrían comenzar en cualquier
momento, la historia ha evidenciado un retraso en la consumación de las cosas:
La verdadera actitud de la Iglesia, y aquello a lo que se
enmarcan todas las representaciones y advertencias de las Escrituras, es mirar
y estar preparado todos los días para que la venida de Cristo se apodere de sus
santos que esperan y vigilan. Pero al asumir fielmente esta actitud y, por lo
tanto, esperar y esperar el rápido cumplimiento de lo que se ha prometido, se
hizo que la Iglesia viera un período notable y acelerado después de otro
fallecimiento sin traer la consumación anticipada. Eva pensó la promesa en el
punto de cumplimiento cuando nació Caín; pero El a quien ella esperaba estaba
aún a 4.000 años de distancia.
Cuando Simeón llevó al salvador infantil a su seno. . .
supuso que había llegado el momento de la consumación; pero fue solo el
advenimiento preliminar que había vivido para presenciar. . . .
Los primeros cristianos tenían una gran expectativa de que,
sin embargo, en su día, el estándar de la venida se vería desplegado en el
cielo, y todas sus esperanzas se consumarían; pero pasaron los días de los
apóstoles y de los padres apostólicos, y todavía "el novio se
demoró". . .
Aunque el Salvador puede venir cualquier día, y nuestro
deber es buscarlo todos los días, aún es posible que todos los pronósticos
actuales sobre el tema puedan fallar, ya que siempre han fallado; para que
pasen años y años de expectación sincera y segura sin traer al Señor del cielo;
y esa demora tras demora, y las repetidas prolongaciones del tiempo de espera
pueden intervenir, hasta que sea necesario para la preservación de la fe del
pueblo de Dios escuchar el nuevo edicto de los labios de su Señor, que "
pero pasaron los días de los apóstoles y de los padres apostólicos, y todavía "el
novio se demoró". . .
Para que pasen años y años de expectación
sincera y segura sin traer al Señor del cielo; y esa demora tras demora, y las
repetidas prolongaciones del tiempo de espera pueden intervenir, hasta que sea
necesario para la preservación de la fe del pueblo de Dios escuchar el nuevo
edicto de los labios de su Señor, que "no habrá más demora”. Aunque la
llegada de la consumación sea lenta, vendrá. No hay otra verdad en la palabra
de Dios que esté tan peculiarmente autenticada. . . .
¿Tendremos entonces
alguna duda sobre el tema? ¿Permitiremos que el fracaso de las figuras y los
pronósticos de los hombres afecten nuestra confianza u oscurezca nuestra
esperanza? ¿Sufriremos los muchos y largos retrasos que se han producido, o que
pueden ocurrir, para llevarnos a las filas del burlador?
Habacuc estableció el principio de la paciencia que se
necesita con respecto a los pronunciamientos proféticos de Dios: “Porque la
visión aún es por un tiempo determinado; pero al final hablará y no mentirá.
Aunque se retrasa, aguarde; porque seguramente vendrá, no se demorará” (Hab. 2:
3). El horario profético de Dios no es nuestro. ¡Con qué frecuencia nos
olvidamos! El resultado es el descrédito de Su Santa Palabra al tergiversar lo
que enseña al hacer que se ajuste a nuestras propias expectativas con respecto
a la edad en la que nos encontramos en el plan de la historia. ¡Pero debemos
ser pacientes! Las predicciones de Dios son seguras, pero son para un tiempo
determinado que solo Él sabe. ¡Recordemos eso! Lo que Dios ha predicho "Él
se manifestará en su propio tiempo”
En
los días de la voz del séptimo ángel, cuando esté para tocar la trompeta
Esta es una excepción a lo que el ángel había dicho y
jurado, que el tiempo ya no debería ser; "pero", o "a menos
que", o "excepto el tiempo de la voz del séptimo ángel", como lo
expresa la versión etíope; cuándo debería comenzar un nuevo período y un tipo
de tiempo, muy diferente del anterior, que entonces ya no debería existir;
porque ahora será el tiempo del reino de Cristo en la tierra, que durará mil
años.
Esta vez no será como
la primera, una época de oscuridad e ignorancia, como lo fue en algunos
períodos, en parte a través de los errores y herejías que se propagaron en los
primeros tiempos, y a través de la barbarie e ignorancia que los godos, hunos y
vándalos, se extendió sobre el imperio, cuando irrumpieron en él, y
principalmente a través del humo del pozo sin fondo, la falsa doctrina y
adoración de los papistas y mahometanos; pero en el tiempo del séptimo ángel,
toda esta oscuridad bruta será eliminada, y será un tiempo de luz indescriptible
y eterna, de modo que no habrá necesidad del sol y la luna, de ministraciones y
ordenanzas del Evangelio, ni lo hará; será un tiempo de aflicción y
persecución; el tiempo en ese sentido ya no existirá, como lo ha estado bajo
los diez emperadores paganos, y bajo los emperadores arrianos, y bajo la
jerarquía papal; porque en este período no habrá más muerte, tristeza, llanto,
dolor y lágrimas; aunque habrá tiempo, será otro tipo de tiempo, bastante
diferente del anterior, que ya no existirá cuando el séptimo ángel comience una
vez; y tan pronto como comience a sonar, esto pondrá fin al tiempo
anticristiano; y al final de su sondeo comenzará el tiempo de Cristo, o el
reinado de mil años: y luego se eliminará toda esta grosera oscuridad, y será
un tiempo de luz indescriptible y eterna.
Entonces
el misterio de Dios será consumado
es decir, el ángel no solo jura que el tiempo ya no será,
sino que también entonces se terminará el misterio de Dios; con lo cual se
entiende, no la resurrección de los muertos, y el cambio de los vivos, que se
llama misterio, ( 1 Corintios 15:51); porque cuando este ángel suene, y haya terminado
de sonar, y venga Cristo, la primera resurrección, o la resurrección de los
muertos en Cristo, habrá terminado, pero no toda la resurrección; porque el
resto de los muertos no volverá a vivir hasta el final de los mil años, sino
que el Evangelio está diseñado, que a menudo se llama misterio, y el misterio
del Evangelio, y contiene muchos misterios, que se denominan el misterios de
Dios que lo respetan, su ser, personas, operaciones y gracia; y son revelados y
dados a conocer por él; y el final de esto puede respetar la predicación del
Evangelio a todas las naciones, que será antes del fin del mundo, y por medio
de la cual la tierra se llenará del conocimiento del Señor, y se convertirán
multitudes de almas; por lo que lo mejor de todo es entender esto de la iglesia
de Dios, (Romanos 11:25 -26 ) ( Efesios 3: 4-6 ); y ahora como la iglesia
anticristiana se llama "misterio", "Babilonia", (
Apocalipsis 17: 5 ); y "el misterio de la iniquidad", ( 2
Tesalonicenses 2: 7 ); entonces la verdadera iglesia cristiana, la nueva
Jerusalén, que baja del cielo y se prepara como una novia adornada para su
esposo, puede llevar el nombre del misterio de Dios; y esto también puede
incluir el misterio de todas las providencias y promesas de Dios, y las
profecías, respetando el estado de su iglesia y personas en la tierra.
Como
ha declarado a sus siervos y profetas
En cuanto a Isaías en ( Isaías 60: 3-5 ) y ( Isaías 66: 8 );
y a Daniel, en ( Daniel 2:44 ) ( Daniel 7:25 ) ( Daniel 12: 6 Daniel 12: 7 ); y
a Zacarías, en ( Zacarías 14: 9 ), y otros; y que era una declaración del
Evangelio, como la palabra significa; eran buenas noticias y buenas noticias;
se les declararon cosas gloriosas, y fueron dichas por ellos, concernientes a
la ciudad y la iglesia de Dios, su feliz estado en la tierra y el reinado de
Cristo en ella.
Este "misterio" que debe ser terminado implica:
(1) La resolución del problema del mal, que
se manifestó por primera vez en el Jardín del Edén, ya que el primer pecado
aparentemente interrumpió el propósito de Adán y Eva en el Jardín del Edén. La
caída trajo la maldición acompañante sobre el hombre y toda la creación, la
maldición ahora anunciada para ser eliminada. Los profetas hablan unidos del
Reino Mesiánico venidero como un tiempo de regeneración, restitución y
restauración, cuando la tierra será restaurada a su estado paradisíaco, un
tiempo en que la maldición sea removida (Apocalipsis 22: 3; Génesis 3: 15; Isa. 11: 6-9; Isa. 60:21 ; Zac . 14:11
; Hechos 3: 19-21)
(2) La resolución de la
aparente paradoja de la elección y el libre albedrío, y una aclaración de
los ordenamientos de la providencia (1 Cor. 13:12; Ef. 1:11).
(3) La consumación del misterio de la piedad,
involucrando la cooperación humana y divina en el establecimiento del reino
teocrático davídico (Isa. 54: 1; Mat. 22: 41-46; Juan 1:51 ; 1 Cor. 15:50 ; Ef.
1:10 ; 1 Ti. 3:16 ).
(4) La finalización
de nuestra redención y el establecimiento de nuestra herencia (Mat. 19: 27-30
; Rom. 8:23 ; Ef. 1:11 ;Ef. 4:30 ; Heb. 9:28 ; 1Jn. 3: 2 ).
(5) La aparición personal
pretribulacional y premilenial de Cristo para que los creyentes preparen la
organización y establezcan su reino antes de su manifestación pública abierta (Deu.
33: 2 ; Isa. 11:11 ; 1Cor.15 : 51-52 ; 1Th.4 : 16-18 ; Tit. 2:13 ; Rev.11 :
17-18 + ).
(6) El cumplimiento
de la venganza divina y la retribución en el Día del Señor (Isa. 61: 2 ;
Isa. 63: 4 ; Rev. 1:10 +)
(7) La revelación
abierta de Cristo, el derrocamiento del Anticristo, la investidura del reino,
la exaltación de los santos, la caída de Satanás (Dan 7: 13-14. ; Lucas
10:18 ; Col . 3: 4 ; 2Th. 1:10 ; 2Th. 2: 8 ; Rev. 20:10 + ).
Debido a que este acabado ocurre al comienzo de la séptima
trompeta (que en sí misma es claramente premilenial), el acabado es
necesariamente premilenial, no postmillennial. El tema de todos los profetas es
el cumplimiento de los convenios y las promesas en las "misericordias
seguras de David" al establecer el Reino mesiánico, que es el reino de Dios
en la tierra, como nuestra herencia eterna (Isa. 55: 3; Mt. 5: 5 ; Hechos 1: 3
, Hechos 1: 6 ; Hechos 13:34 ; Hechos 15: 14-18 ; Hechos 28:31 ; Rom 4:13 ; Rom.
8:17 ).
Pedro enfatizó esta misma verdad en su primer sermón después
del Día de Pentecostés, que el cielo recibiría a Jesús "hasta los tiempos
de restauración de todas las cosas, que Dios ha hablado por boca de todos Sus
santos profetas desde que comenzó el mundo" (Hechos 3:21). Este es un acto
de redención, pero en una escala mucho mayor que la salvación humana sola.
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