¿Qué es
el cuerpo de Cristo?
Es la unidad o
grupo de personas que han sido redimidos por Cristo y regenerados por el Espíritu
Santo (nacidos de nuevo), y que como miembros de la familia de Dios han
recibido un don para ser ejercitado en la comunidad donde Dios los ha llevado.
La familia de Dios trasciende nacionalidad, denominación y costumbres. Tiene
que ver con el corazón y una relación personal con Cristo.
La iglesia local
es
la congregación a la cual pertenece el individuo.
La iglesia
universal es el conjunto de creyentes verdaderos alrededor del
mundo. (Rom 12:5)
Pablo
usa el concepto del cuerpo humano para enseñar cómo los cristianos deben vivir
y trabajar juntos. Así como las diferentes partes del cuerpo actúan bajo la
dirección del cerebro, los cristianos deben hacerlo bajo la autoridad y mandato
de Jesucristo (1Co_12:12-31; Ef_4:1-16)
Fundamento
de la Iglesia
Mateo 16; 13-18 “Cuando llegó Jesús a la
región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién
dicen los hombres que es el Hijo del Hombre? 14 Y ellos dijeron: Unos,
Juan el Bautista; y otros, Elías; pero otros, Jeremías o uno de los
profetas. 15 Él les dijo*: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? 16
Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
17 Y Jesús, respondiendo, le dijo: Bienaventurado eres, Simón, hijo de
Jonás, porque esto no te lo reveló carne ni sangre, sino
mi Padre que está en los cielos. 18 Yo también te digo que tú
eres Pedro (Gk. Petros), y sobre esta roca (Gk. Petra)
edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra
ella”.
La
roca sobre la cual Jesús construiría su Iglesia es una alusión a (1) Jesús
mismo (su obra de salvación al morir por nosotros en la cruz); (2) a Pedro (el
primer gran líder de la iglesia en Jerusalén); (3) la confesión de fe que Pedro
hizo y que todos los verdaderos creyentes posteriores deberían hacer Así como
Pedro había revelado la verdadera identidad de Cristo, Jesús revelaba la
identidad y el rol de Pedro. Pedro más tarde recuerda a los cristianos que son
la Iglesia construida sobre el fundamento de los apóstoles y profetas con
Jesucristo como la piedra angular (1Pe_2:4-6). Todos los cristianos se unen en
la Iglesia por la fe en Cristo Jesús como Salvador y Señor, tal como Pedro lo
expresa aquí (Ef_2:20-21). Jesús alabó a Pedro por su confesión de fe. Es fe,
como la de Pedro, la que viene a ser el fundamento del Reino de Dios.
La
Iglesia es el “epicentro” de lo que Dios hace en el mundo
La palabra
iglesia viene de un vocablo en griego, EKKLESIA. Ek significa “fuera” y Kaleo
es “llamar”. Hemos sido “llamados fuera”. De ahí que 2 Timoteo 1: 19 dice que
“hemos sido llamados con llamamiento santo”. La palabra santo significa apartado,
separados para Dios.
La
Iglesia desde la Perspectiva de Dios. -El
la llama Su “Esposa”-
Efesios 5; 24-27
24 Pero así como
la iglesia está sujeta a Cristo, también las mujeres deben estarlo a sus
maridos en todo. 25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la
iglesia y se dio a sí mismo por ella, 26 para santificarla, habiéndola
purificado por el lavamiento del agua con la palabra, 27 a fin de presentársela
a sí mismo, una iglesia en toda su gloria, sin que tenga mancha ni arruga ni
cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada.
Pablo
reitera a los esposos que amen a sus esposas, lo que no hace al pedir a las
esposas que se sometan a sus esposos. ¿Cómo debiera amar un hombre a su esposa?
(1) Debiera estar dispuesto a sacrificar cualquier cosa por ella. (2) Debiera
buscar su felicidad como asunto de primera importancia. (3) Debiera cuidarla
como cuida su cuerpo. Ninguna esposa necesita temer someterse a un hombre que
la trata así.
La
muerte de Cristo santifica y purifica la Iglesia. El nos limpia de la vieja
manera de vivir del pecado y nos aparta para un servicio santo especial (Heb_10:29;
Heb_13:12). Cristo limpia la iglesia por el "lavamiento" del
bautismo. A través del bautismo nos preparamos para formar parte de la iglesia,
así como las novias del Cercano Oriente antiguo se preparaban para el
matrimonio con un baño ceremonial. Es la Palabra de Dios la que nos limpia (Jn_17:17;
Tit_3:5).
Implicaciones
de que la Iglesia es su “Esposa”:
·
Qué
tanto ama Cristo su iglesia? Se entregó por ella
·
Qué
implica la figura de “esposa”? Amor apasionado y su
entrega es la muestra
·
Cómo más
Cristo demuestra su amor por su “esposa”? Con su continua
intervención para que su Iglesia sea santa, gloriosa, sin mancha, sin arruga,
inmaculada.
Jesucristo la llama Su “Cuerpo”
Efesios 5; 29-32
29 Porque nadie
aborreció jamás su propio cuerpo, sino que lo sustenta y lo cuida, así como también
Cristo a la iglesia; 30 porque somos miembros de su cuerpo. 31 Por esto el
hombre dejara a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán
una sola carne. 32 Grande es este misterio, pero hablo con referencia a Cristo
y a la iglesia.
Las
instrucciones específicas que el apóstol Pablo da a esposos y esposas
constituyen un destello de las relaciones entre Cristo y su Iglesia: un modelo
celestial para todo matrimonio terrenal.
¿Cómo
debo conducirme con mi esposa? Mira a Cristo, el Esposo divino, en su relación
con la Iglesia: la ama, se sacrifica por ella, está atento a sus intereses, la
cuida; sé tan sensible a las necesidades de ella y a lo que la hace sufrir,
como lo eres con los miembros de tu propio cuerpo.
A
su vez, la esposa debe preguntarse: ¿Cómo debo conducirme con mi marido? Fíjate
en la desposada escogida, la Iglesia, en su relación con Cristo; respétalo,
reconoce que él está llamado a ser la «cabeza» de la familia, responde
positivamente a su liderazgo, escúchale, encómialo, mantente unida en propósito
y en voluntad con él; sé una ayuda verdadera (Gen_2:18)
Implicaciones
de que la Iglesia es su “Cuerpo”
·
¿Qué
hacemos por nuestros cuerpos? Los sustentamos, los cuidamos
·
¿Cómo
se relaciona el cuerpo con la cabeza? El cuerpo actúa lo que la cabeza
ordena. Las funciones vitales son realizadas en la cabeza pero el accionar lo
hace el cuerpo.
·
¿Qué
más implica que somos su cuerpo? Nuestro dolor es su dolor.
Nuestras necesidades son suyas.
Jesucristo
la llama Su “Templo”. El lugar de
su habitación
Efesios 2; 19-22
19 Así pues, ya
no sois extranjeros ni advenedizos, sino que sois conciudadanos de los santos y
sois de la familia de Dios, 20 edificados sobre el fundamento de los apóstoles
y profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular, 21 en quien
todo el edificio, bien ajustado, va creciendo para ser un templo santo
en el Señor, 22 en quien también vosotros sois juntamente edificados para
morada de Dios en el Espíritu.
Muchas
veces, al edificio de una iglesia se le llama la casa de Dios. En realidad, la
casa de Dios no es un edificio sino un grupo de personas. El vive en nosotros y
a través de nosotros se da a conocer al mundo. La gente puede ver que Dios es
amor y que Jesús es Señor cuando vivimos en armonía con otros y de acuerdo con
lo que Dios dice en su Palabra. Somos ciudadanos del Reino de Dios y miembros
de su familia.
Es
Posesión de Dios comprada con sangre.
Hechos 20:28
28 Tened cuidado
de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual el Espíritu Santo os ha hecho
obispos para pastorear la iglesia de Dios, la cual El compró con su
propia sangre.
La
Vida en el Cuerpo de Cristo.-
La iglesia ha
sido llamada a reflejar el carácter de Dios, a proclamar su gloria y el plan de
redención de nuestro Señor. (Efesios 1) -Pablo
escribió esta carta a la iglesia de Efeso y a todos los creyentes, a fin de
darles una enseñanza profunda en la manera de nutrir y mantener la unidad de la
iglesia. Quiso que circulara esta información importante en forma escrita
porque él se hallaba en prisión y no podía visitar las iglesias personalmente.
Las palabras "en Efeso" no aparecen en algunos de los manuscritos más
antiguos. Por lo tanto, esto se parece mucho a una carta circular a las
iglesias locales de la región. Pablo no hace referencia a algún problema en
particular ni a una situación local, tampoco incluye saludos personales.-
Propósito
número uno de la Iglesia: Glorificar a Dios (Efesios 1). La evangelización,
el discipulado, la prédica, etc. son simplemente medios o formas de
glorificarle.
Funciones
básicas de la Iglesia (Misión).-
·
Adoración
(Hechos 2:47)
·
Evangelización
(Mateo 28:16-20)
·
Instrucción
/ Predicación (Hechos 2:40-42; Efesios 4:11-12)
·
Koinonía
(Comunión con los hermanos) Hechos 2:42-46
·
Servicio (Gálatas
6:9-10)
Visión
de la Iglesia.-
Para cada
iglesia local Dios tiene una visión específica de acuerdo al llamado para esa congregación.
Esa visión usualmente va acorde con los dones y talentos de su liderazgo y las necesidades
de esa comunidad.
¿Qué implica
ser parte del cuerpo de Cristo?
Ser parte del
cuerpo de Cristo implica un compromiso espiritual y moral que incluye, pero no
se limita a, orar por el desarrollo de nuestra iglesia y apoyar la visión de
los líderes del cuerpo de Cristo.
El ser parte del
cuerpo de Cristo conlleva responsabilidades específicas:
1.
Debemos amarnos - Juan 13:34-35
¿Qué tipo de
amor debe haber en nosotros? Colosenses 3:13 habla de soportarnos unos a
otros, lo que implica el aceptar al otro con sus diferencias y debilidades
entendiendo que yo también soy alguien con debilidades y disfuncionalidades.
Cristo usa las diferencias de nuestros hermanos para trabajar en el carácter de
cada uno de nosotros.
Jesús
dice que si nuestro amor es semejante al suyo será una demostración de que
somos sus discípulos. ¿Ve la gente disputar por pequeñeces, celos y división en
su iglesia? ¿O sabe que son seguidores de Jesús al ver el amor que se tienen?
Amar a otros no era un mandamiento nuevo (Lev_19:18),
pero amar a otros de la misma manera que Cristo amó a otros era revolucionario.
Ahora debemos amar a otros basándonos en el amor sacrificial de Jesús por
nosotros. Tal amor no solo llevará a los inconversos a Cristo, sino también
mantendrá a los creyentes fuertes y unidos en un mundo hostil a Dios. Jesús fue
un ejemplo viviente del amor de Dios, del mismo modo que debemos nosotros ser
ejemplos del amor de Jesús
2.
Debemos congregarnos. (Heb. 10:24-25)
Todo el que
declare ser cristiano y no se congregue, está en desobediencia de la Palabra de
Dios. Los Cristianos son como las brasas que arden cuando están juntas y se
apagan cuando se separan.
El
no asistir a las reuniones cristianas es perder el estímulo y la ayuda de otros
cristianos. Nos reunimos para anunciar nuestra fe y fortalecernos los unos a
los otros en el Señor. Al acercarnos al fin de los tiempos y al estar próximo
el "día" en que Cristo volverá, afrontaremos problemas espirituales,
tribulaciones e incluso persecución. Fuerzas anticristianas crecerán en
intensidad. Las dificultades nunca debieran ser excusas para no congregarnos.
En cambio, a medida que surgen las dificultades, debemos hacer un mayor
esfuerzo por ser fieles en la asistencia.
3.
Debemos ministrarnos unos a otros. (1 Pedro 4:10)
Hemos recibido
algo para darlo a otros como un reflejo de nuestro amor. Dios nos coloca en el cuerpo
de Cristo para recibir bendiciones y compartir bendiciones. Nuestra vida debe
enriquecer la de otros.
Algunas
personas, muy conscientes de sus talentos, creen que tienen el derecho de usar
sus aptitudes como lo consideren conveniente. Otras creen que no tienen ningún
talento. A ambos grupos Pedro se dirige mediante estos versículos. El dice que
todos tenemos algún don; halle el suyo y úselo. También destaca que deben
dedicarse a los demás nuestros talentos; ninguno de ellos es para nuestro
disfrute exclusivo. Pedro menciona el hablar y el servicio a los demás. Pablo
los pone en la lista e incluye otros dones más en Rom_12:6-8; 1Co_12:8-11; Ef_4:11.
Juzguemos
si es así o no, la Palabra nos llama a:
·
Amarnos unos a otros
(Juan 13:34)
·
Dedicarnos los unos a los otros
(Rom. 12:5)
·
Honrarnos los unos a los otros
(Rom. 12:10)
·
Regocijarnos los unos a los otros
(Rom. 12:15)
·
Servirnos los unos a los otros
(Ga. 5:13)
·
Perdonarnos los unos a los otros
(Ef. 4:32)
·
Alentarnos los unos a los otros
(1 Tes. 5:11)
·
Ser hospitalarios unos con otros
(1 Ped. 4:9)
·
Confesarnos pecados unos a otros
(Stgo. 5:16)
·
Orar los unos por los otros
(Stgo. 5:16)
·
Evangelismo
Mt. 28:19
·
Discipulado
Ef. 4:11-12
·
Adoración
Ef. 1:5-6
·
Servicio
Gal. 6:9-10
·
Comunión
Hch. 2:
4.
Ser parte de la vida de nuestros hermanos.
1 Corintios 12:26-27
Esto requiere
invertir cantidad de tiempo para tener calidad de relaciones. “No hay
calidad sin cantidad”.
¿Cómo
reacciona usted cuando otra persona es honrada? ¿Cuál es su respuesta cuando
una persona está sufriendo? Se nos pide regocijarnos con aquellos que se gozan
y llorar con los que lloran (Rom_12:15). Con frecuencia, desafortunadamente,
nos ponemos celosos con los que se gozan y nos apartamos de aquellos que
lloran. Los creyentes están en el mismo mundo, no hay tal cosa como
cristianismo individual. No podemos estar de acuerdo sólo con nuestra relación
con Dios, debemos involucrarnos en las vidas de los demás.
5.
El rendirnos cuentas para evitar desviarnos.
Mateo 18:15-16
Estas son
instrucciones de Jesús para enfrentarnos con los que pecan en contra nuestra.
Tienen que ver con (1) cristianos, no con los que no lo son, (2) con pecados
cometidos contra usted, no contra otros y (3) con la resolución de
conflictos que surgen en el contexto de la iglesia, no en toda la comunidad.
Las palabras de Jesús no son una licencia para un ataque frontal a cada persona
que nos hiere o margina. No son una licencia para iniciar una campaña
destructiva de chismes o pleito de iglesia. Tienen como objetivo reconciliar a
los que están en desacuerdo, de modo que todos los cristianos puedan vivir en
armonía.
6.
La reprensión es fruto del amor...
·
El verdadero amor no es permisivo
·
Confrontar es necesario
·
A veces permitimos cosas incorrectas por
evitar un conflicto...Cuando no llevamos a cabo nuestra responsabilidad
bíblica, nuestra irresponsabilidad crea un mayor conflicto. Es una iglesia que
está dispuesta a “echarme” - Disciplina“ Obtengo una maravillosa
sensación de protección al saber que si cometo un pecado escandaloso y no
muestro arrepentimiento mi iglesia no va a aceptarlo. Me pedirán que cambie. Con
paciencia me guiarán a la Palabra de Dios. Y al final, si me niego a cambiar,
con amor me expulsarán”.
7.
Tener un espíritu de unidad.
Una
persona debe ser amonestada cuando está causando división que amenaza la unidad
de la iglesia. Esta amonestación no debiera ser una acción dura sino que debe
tender a corregir la naturaleza divisiva del individuo y buscar su restauración
a la comunión. Una persona que rechaza la corrección debería ser apartada de la
comunión. Como dice Pablo: ese hombre es "condenado por su propio
juicio", está pecando y lo sabe.
Juan 17: 20-23 enfatiza
varias veces la obligatoriedad de la unidad del cuerpo de Cristo. La falta de
unidad impide que el mundo crea en Cristo y en nosotros. La unidad del cuerpo
de Cristo es tan esencial que Pablo recomienda evitar al hermano divisivo. Tito
3:10 y Romanos 16:17
8.
Obedeced a nuestros líderes
Hebreos 13:17 “Obedeced
a vuestros pastores y sujetaos a ellos, porque ellos velan por vuestras almas,
como quienes han de dar cuenta. Permitidles que lo hagan con alegría y no quejándose,
porque eso no sería provechoso para vosotros”.
La
tarea de los líderes de la iglesia es ayudar a que la gente madure en Cristo.
Los discípulos que colaboran facilitan grandemente el peso del liderazgo.
Características de una iglesia saludable. -Liderazgo
de la Iglesia.-
La cabeza del
cuerpo es Cristo, pero dentro de la iglesia Dios ha colocado líderes que
llamamos pastores, ancianos y diáconos. Los ancianos son los líderes
espirituales de la congregación y los diáconos tienen a su cargo más bien la
parte administrativa de la iglesia. (Muchos entienden que el oficio de diácono
tuvo su origen en la selección de los 7 hombres mencionados en el libro de los
Hechos, capítulo 6, para atender las mesas y a las viudas. Mientras los
apóstoles se dedicarían a la ministración de la Palabra de Dios.)
El pastor es la
cabeza de ancianos. Estos líderes tienen que llenar los requisitos Bíblicos que
aparecen en 1Timoteo 3: 1-13; Tito 1: 5-9; 1 Pedro 5: 1-5.
El Espíritu
Santo proporciona el patrón del gobierno de la iglesia y pone a ciertos varones
por ancianos cuando éstos reúnen los requisitos nombrados por el Espíritu, y
son seleccionados por la congregación. Los hermanos que sirven como ancianos
que no reúnen los requisitos nombrados en estos textos no han sido puestos
por el Espíritu Santo sino por los hombres. Tales hombres no calificados
causan mucho daño a la iglesia del Señor. También este texto aclara bien el
punto que el Espíritu Santo controla a los obispos. Los obispos no controlan al
Espíritu Santo como cree el clero romano. Según el catolicismo los obispos
hacen leyes para gobernar la iglesia, pero según la Biblia el Espíritu Santo
pone y quita a los obispos si éstos no siguen las instrucciones del Nuevo
Testamento.
La iglesia
primitiva no tuvo pastoras, ni ancianas; pero si diaconizas como es el caso de
Febe (Romanos 16:1)
Reconocemos y
estimulamos el liderazgo de las mujeres en la educación y discipulado de otras mujeres,
así como también en múltiples otras áreas.
1
Pedro; 1-5 Pedro describe varias características de los buenos líderes de la
iglesia: (1) tienen bien claro que están cuidando el rebaño de Dios, no el de
ellos; (2) dirigen con el deseo sincero de servir, no por obligación; (3) están
preocupados por lo que pueden dar, no por lo que puedan conseguir; (4) guían
mediante el ejemplo, no por la fuerza. Todos guiamos a otros de algún modo.
Cualquiera que sea su función, su liderazgo debe manifestar esas
características.
-Observaciones
Finales.-
El Señor coloca
sus hijos dentro del Cuerpo de Cristo para ser sanados, fortalecidos,
edificados y equipados. El creyente descubre sus dones en la medida en que se
integra y sirve dentro del cuerpo de Cristo.
¡¡¡QUE DIOS SEA
GLORIFICADO EN EL NOMBRE DE CRISTO!!!
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